domingo, 13 de diciembre de 2009

Creo que le herí. No, lo sé. Es por seguro que lo hice. Tenía que hacerlo... supongo.
¿Cuál es el precio de la verdad? No me interesa, simplemente sé que no haré feliz a alguien a costa de mi propia felicidad. "No eres un obstáculo" le he repetido varias veces, y en definitiva no pretendo echarme para atrás. No lo es ahora, ni nunca lo será. El amor no corta alas, enseña a caminar sobre la tierra sin dejar de volar. Su amor no debe aprisionarme. Mis sueños son demasiado caros (realmente, una Universidad no es barata en lo absoluto!). Él lo sabe, los conoce. Jamás nos hemos mentido al mmento de hablar de futuro...
Yo quiero cosas diferentes a las de él.
No tengo prisa absoluta por crecer. Me he dado a la taera de especificar mis metas y planear a no muy largo ni muy corto plazo. He empezado a pensar que soy capaz de madurar... y él no tiene la mente para decir qué hacer mañana. Me preocupa.
No están en juego los sentimientos, sólo los ideales. El futuro juntos y el porvenir.

Lo herí. Lo sé.
Dijo.. "quiero que te vengas conmigo a vivir" y yo dije "buena suerte, será dificil".
Tengo 18 años, no necesito pensar en ese tipo de cosas. Quiero mi carrera, quiero ejercer, quiero una casa, y viajar, viajar por Sudamérica.
Lo herí, y en realidad no me arrepiento. Tengo que dejar en claro desde el principio lo que yo quiero. Él lo sabe, no debería dolerle. Sé lo que quiere, y lo respeto. Planeo dárselo, pero todo a su tiempo. No sé... No sé que pensar cuando se pone de la manera en que lo hace... No me da miedo, ni desconfianza, sencillamente... dudo poder mantener el gusto por el respirar si a cada paso me recuerdan que "quiero un bebé". No lo soportaré!. No quiero hijos ahora, no quiero sexo sin protección, no quiero una casa a orillas de la ciudad ni levantarme a las 4 am los lunes a hacer de desayunar. No puedo vivir con alguien que no tiene estudios suficientes para mantenerme cuando yo no los tengo para lo mismo. No quiero depender de nadie de esa manera. No quiero ni lo haré, no hay poder humano o divino que me obligue a ceder. No, claro que no.

Sé que me quiere, y trata de cuidarme, pero esa no es la manera. Prisión, a eso huelen sus palabras de presión. Lo amo, en efecto, pero lo amo porque me amo, y lo cuido porque me cuido. Y si yo no me doy valor, nadie lo hará por mí.

Quiero ser yo. Quiero ser grande, a su tiempo. Quizá ya lo soy, pero no lo suficiente, no a tal medida. Y no pienso correr riezgos de los cuales luego me arrepienta. No quiero quedarme con el "si yo hubiera".

Caray... qué dificil es compartir tu vida... con alguien que piensa un cuanto más distinto que tú.

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