sábado, 24 de septiembre de 2011

Ruinas.
Las famosas ruinas habían llegado a su vida, como todas las personas le habían advertido. Polvo por doquier, vidrios en el suelo, huellas de despecho, pedazos de cielo a través del destrozado techo...
Ruinas.
Y debajo de la almohada ensangrentada, el detonador de su locura.
Ella es hermosa... hermosa como la luna.

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