Quimeras errantes

Me acuerdo cuando te conocí y cuando te desconocí. Tengo en mi memoria quién era antes de amarte, en quién me convertía cuando te amaba, y tengo presente quien soy ahora, cuando todo ha pasado.

Recuerdo perfectamente qué sentía al verte, al imaginar que en verdad podía sentirte. Ha pasado mucho tiempo y de manera extraña, sigo escribiéndote... SIgo conservando la mayoría de cosas que logré a tu lado, y que robé de tí. Ese humor negro tan ilarante, ese positivismo impreso en cada acción, esa burla, esa gracia, esa necesidad de hacer felices a quienes me rodean por mero capricho... Y cargo dentro de mi lo que aprendí, como el pedir perdón cuando valga la pena, como el callar mis penas por no hacer daño ajeno, como el nunca dejar de sonreír o incluso el gusto de escribir lo "más mejor" posible.

Hoy es tu cumpleaños. Hoy tu alma se imprime la etiqueta de los 25 años, hoy me doy cuenta de que van 3 años desde entonces. Desde que te mandé ese mail diciéndote lo mucho que te amaba mientras tu mojabas tus pies en las arenas d aquellas playas...

Y lo lamento, no puedo evitar hacer esto, no puedo evitar recordarte para dedicarte unos momentos de mi tiempo, no puedo evitar pensar en qué será de tu vida, o en si haz cambiado... Sé que sí, pero... ¿Cómo?... ¿Quién eres ahora?... Ah, sería bello saberlo, sabes?... Porque de alguna manera, siempre te he admirado, por más dolor que me hayas causado en el pasado, no puedo evitar querer mirarte y saber que ahi estuviste, y que ahi estás, que quí sigues, que el tú que yo amé sigue conmigo, a mi lado, abrazandome cada que me caigo. Apesar de que amo alguien más, a pesar de no nombrarte como antes ni de soñarte ni de sentirte, aquí sigues, sin intenciones de "volver" a irte...

Me acuerdo cuando era lindo que lloviera, y mirar al suelo... El reflejo de los charcos daba la sensación de caminar por encima del cielo, y toda esa magia la atribuía a tí. Yo era pequeña e ilusa y muy tonta... Ambos lo éramos... Y yo sabía que el viento era el mismo tanto para ti como para mi, y que la luna era la misma que brillaba en nuestras mismas noches, y que aunque no nos tokáramos, el sol nos daba el calor de parte del otro... Me acuerdo cuando entraba en mi cuarto, en la privacidad mía de la casa, donde era libre de bailar imaginandote a mi lado... Si te dije que estoy loca, no jugaba, corazón... Y pretendía abrazarte mientras abrazaba a mi almohada, y soñaba con besarte al despertar por las mañanas... Yo era feliz porque existías, porque vivías dentro de mí, y aún más... Y porque no había alma más sublime que la tuya, más humana y mortal, dentro de tu (mi) eternidad...

Y ahora que en este instante no somos más que un recuerdo... en el que quizá tu ayer me odie, me desprecie o sencillamente haya intentado olvidarme... seguimos siendo un recuerdo... el más bello que yo tengo, por muy pathethico que suene eso.

No somos más que un lejano y borroso recuerdo, y eso seguiremos siendo hasta extinguirnos y apagarnos. Moriremos lejos y solos, rompiendo así esas promesas de amor eterno cuando uno es pequeño, estúpido y feliz... A veces extraño ser pequeña y estúpida y feliz... Pero justo por eso, nos pasó lo que pasó...

Cuando decías que yo cambiaría... cuando decías que sería mayor de edad y tendría a otro y entonces te olvidaría... Cuando juraste que, aún lejos de mí, siempre me amarías... Cuando escribímos nuestros nombres en arena... Ahh, ese mar... a donde irá a parar con tantas lágrimas nuestras... No lo sé...

Deseo que seas feliz. Que este año nuevo tuyo sea el mejor, el más iluminado de todos los que haz vivido ya... Que disfrutes de tu vida y quizá le des un nuevo rumbo. Que hagas lo que te haga feliz, y hagas felices a quienes te rodean. Te deseo mucho amor y mucha buena compañía. Te deseo alegrías y suspensos con sorpresas positivas, y mil llantos y mil y una sonrisas... Y veranos llenos de playas, e inviernos llenos de paz... Y cariño en tu familia. Y buenos amigos, y realidad.

FELIZ CUMPLEAÑOS, MAURICIO.

[un abrazo...]